Desde la entrada en vigor hace un año de la directiva de reciclaje de
productos electrónicos, todos podemos devolver el ordenador o la
pantalla viejos al comprar nuevos. Se supone que el coste del
tratamiento de ese equipo está incluido en el precio, como si de un
canon se tratara, pero son pocos los comercios que avisan de esta
circunstancia.
Los fabricantes tampoco han hecho un gran esfuerzo por dar a conocer esta posibilidad y sólo HP
parece reconocer esta opción en su web. Según la ley, el productor debe
hacerse cargo de los costes de gestión y recogida de los equipos
antiguos para su posterior tratamiento en centros especializados de
reciclaje.
En Euskadi, el elevado número de estas instalaciones, los garbigunes
, hace que la mayor parte de las labores las realicen directamente los
consumidores depositando los residuos en estos ‘puntos limpios’.
Además, la principal empresa del Estado de reciclaje de aparatos,
Indumetal Recycling, está situada en Bizkaia, por lo que la Comunidad
Autónoma Vasca ha sido pionera en recogida de productos electrónicos.
En 2003 en la CAV se recuperó algo más de medio kilo de este tipo de
objetos por habitante, lejos aún del objetivo de cuatro kilos que exige
Bruselas.
Aunque el reciclaje genera pequeños ingresos, algo
superiores en el caso de los móviles, los costes son muy elevados y
están recayendo por el momento en la Administración. Sin embargo, la
legislación prevé que los fabricantes posean sistemas de tratamiento de
los desechos electrónicos y que especifiquen claramente en sus facturas
el precio que tiene esta labor. Sin embargo, pocos lo están haciendo.
Frente a esta situación, en otros países se aplica un canon de entre
uno y tres euros, sobre el coste final del producto.
Extraida de aquí , los enlaces son nuestros.